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El origen de la escasez de contenedores y recomendaciones

El origen de la escasez de contenedores y recomendaciones

Sin duda alguna, el Covid-19 y la crisis sanitaria del 2020 ha marcado al mundo, su población, perspectiva y por supuesto, su economía. Uno de los sectores que se ha visto gravemente afectado es el comercio internacional y el transporte marítimo, generando problemas en el mercado como lo es la escasez de contenedores a nivel mundial.

 

Esta situación ha provocado un importante incremento en las cifras y tarifas de los fletes marítimos. Según el vicepresidente de la Federación Internacional de Asociaciones de Agentes de Carga (FIATA por sus siglas en inglés), Galo Molina, actualmente el uso de un contenedor de 40 pies de China a Latinoamérica tiene un costo aproximado de 11,000 o 12,000 dólares, mientras que a Estados Unidos el costo es de 15,000 dólares.

 

Debemos considerar que en el 2020 el coste de envió de contenedores estaba en un rango de 2,000 – 3,000 dólares y la tendencia dice que los costos no disminuirán durante lo que resta del año 2021. Aun así, la situación y los precios pueden variar según cada país y claro, dependiendo del tamaño de la empresa, ya sea de un corporativo que obtenga tarifas por volumen o una empresa pequeña con poca capital y mercancía para negociar.

 

Por ello, en este articulo trataremos de aterrizar brevemente el origen de la crisis actual de escasez de contenedores y algunas posibles soluciones y recomendaciones para afrontarlo como empresa.

ORIGEN DE LA ESCASEZ DE CONTENEDORES

Desde marzo del 2020 la economía mundial se vio obligada a alentarse con el inicio de la pandemia, generando graves complicaciones como los bloques y restricciones en puertos, recortes en cuanto a los trabajadores portuarios, la reducción de barcos en las navieras y el cierre de agencias logísticas. Asimismo, otra principal consecuencia fue la falta de movimiento de contenedores marítimos, la gran parte quedándose estancada en Europa y especialmente, Estados Unidos.

 

Dadas las circunstancias, no era viable enviar de vuelta a China los contenedores, causando que las exportaciones se demoraran en salir hasta 3 semanas de lo inicialmente planteado, iniciando así un aumento desproporcionado de la oferta y demanda de espacios en contenedores y provocando un impacto negativo en toda la cadena logística.

 

Sin embargo, la economía se fue recuperando gracias a que China logró abrir sus fábricas de nuevo, enfocándose en los suministros médicos para combatir el COVID-19 y convirtiéndose en un principal proveedor de mascarillas / tapabocas. Esto siguió causando conflictos, ya que el incremento extraordinario de las actividades comerciales del Gigante Asiático y la alta demanda chocó con la poca mano de obra, la falta de capacidad de transporte y la reducción de barcos por parte de las navieras, elevando así los precios de fletes.

 

Debido a la insuficiencia de personal para transportar los contenedores con mercancía, se generaron retrasos para que éstos fueran liberados del despacho de contenedores, incrementando así los costos. Como ejemplo, antes en países como Estados Unidos un contenedor tardaba 2 días para retornar a puerto, y durante la pandemia el proceso llegó a durar 1 o 2 semanas, lo que disminuyó también el tráfico de contenedores de Estados Unidos hacia China.

SOLUCIONES Y RECOMENDACIONES

Seria sencillo pensar que la escasez de contenedores puede solucionarse con la fabricación de más unidades; sin embargo, a corto plazo no es la forma de superar esta crisis, ya que ésta también influye en los fabricantes. La principal productora, China International Marine Containers, no da abasto por el gran tiempo y recursos que requiere la fabricación de contenedores nuevos, tomando en cuenta las restricciones ante el Covid-19.

 

Por ello, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD por sus siglas en ingles) analizó los factores que determinan la escasez de contenedores y dictaminó 3 consideraciones clave para los responsables políticos como recomendaciones para evitar que se genere una situación como esta en el futuro.

 

1. Implementar reformas para la facilitación y digitalización de los procesos comerciales

Los responsables políticos deben aplicar ciertas acciones que faciliten el comercio y genere una disminución en costos, estas medidas están incluidas en el Acuerdo sobre facilitación del comercio realizado por la Organización Mundial del Comercio (OMC), que se basan en la modernización de procedimientos para importar y exportar mercancía. Esto con el propósito de fortalecer las cadenas de suministro través de reformas como la reducción del contacto físico entre los funcionarios en aduanas y trabajadores del sector logístico para su mayor protección.

 
2. Mejorar la rastreabilidad y seguimiento de contenedores en el comercio marítimo
Los responsables políticos deben impulsar la transparencia y fomentar la colaboración entre los implicados en los procesos de la cadena de suministro marítimo, con el objetivo de mejorar el seguimiento de contenedores a lo largo de las escalas portuarias, reduciendo así el margen de error en los horarios estructurados.
 
3. Reforzar las autoridades nacionales y garantizar una sana competencia

Los gobiernos deben asegurarse de que sus Autoridades Nacionales de Competencia tengan los recursos y la experiencia requerida para investigar, sancionar y, de lo posible, evitar las prácticas abusivas por parte de algunos transportistas y navieras que intentan aprovecharse de su posición en las actividades de la cadena de suministro.

    Si bien, en países de desarrollo quizá es más complicado, es importante que se ejerza la supervisión estricta dentro del sector, ya que algunas estrategias abusivas también pudieron haber influido en el reposicionamiento de la industria de transporte marítimo tras su crisis al principio de la pandemia.

Para terminar, es importante considerar que el impacto de las tarifas de contenedores se debe a que alrededor del 80% del comercio mundial en mercancía se realiza vía transporte marítimo. Por el momento, aunque se comiencen a ver algunos avances en la disminución de costos de flete, los expertos concuerdan en que los problemas logísticos derivados de la pandemia continuarán durante gran parte del 2022.

 

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